Ser tu propio jefe es el sueño de todo aquel universitario. Normalmente, claro, que siempre hay vichos raros, como los que prefieren hacer una obra faraónica de más de 600 kilómetros para llevar agua de una cuenca casi seca a una seca en lugar de construir desaladoras, pero ese es otro tema… El caso es que a mí me ha…